Comarca de Gordón

[prejub]

Fuego,
Elemento destructor que forjó tus alas en la noche de los tiempos,
Símbolo indestructible de tu vuelo milenario,
Signo y estandarte de tu orgullo indomable,
Culminación de la naturaleza,
Tu aliado y tu padre oh poderoso fénix.

Eones hace ya que tu fuego surgió de la tierra,
Surgiste para dominar el cielo,
Para formar un trono del que nadie podrá echarte jamás,
Para dominar sobre las otras razas,
Portador de la llama inmortal que quema el alma y el cuerpo.

Protector de los valientes,
Rey de aquellos que ciegamente te siguen,
Tu majestuosa presencia hace de nosotros mortales nimias existencias,
Recordándonos nuestra naturaleza nuestro fin,
No ser más que servidores de quien nació para reinar,
Sirvientes de quien el destino decidió renombrar.

Tú inspiraste a los grandes reyes,
En tu nombre Roma conquistó el mundo,
En tu nombre se crearon reinos,
En tu nombre valientes dieron sus vidas,
En la esperanza de la contemplación de tus alas.

Llama incandescente y luminosa,
Grandeza inalcanzable por mortales,
Creación y destrucción en su misma esencia,
Poderes que superan ya lo divino,
Pues tu mismo creaste la divinidad.

Contemplas mi camino,
Sabedor de todo lo que ha de pasar,
Divertido juegas con nuestras vidas,
Observador silencioso del mundo,
No te importa lo que pase desde trono inmortal.

Ardiente pasión, ira incontrolada,
Sentimientos intensos que provocas,
No hay tiempo para el descanso,
La batalla me llama he de responder,
Esta noche muertes serán ofrecidas en tu nombre.

Fénix ser irreal, mito lejano hace tiempo olvidado,
Por aquellos que no supieron creer,
En el juicio que presides sus almas has de quemar,
Muerte al hereje que se olvida de ti,
De su padre de su dios de aquel que iluminó su alma.

Contempla mi rostro, fíjate en él,
No hay dudas, no hay miedo, solo una firme decisión,
De servirte, de adorarte, de realzar tu nombre olvidado,
No olvides a tu siervo que en batalla demostrará su valía,
Dale tu fuerza, dale tu fuego,
Nómbrale esclavo y paladín de tu llama.
F.O.C.
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[Yosco]

FÉNIX.

Una soberbia evocación del fuego en tono épico. No solamente se desarrolla el valor del fuego como elemento poderoso de destrucción, sino como elemento de purificación y ejemplo del avaricioso y constructivo sentimiento personal de autoafirmación, como fuerza arrolladora que empuja al aprendizaje y al conocimiento. Es así el fuego, la luz, que se convierte en símbolo de la filosofía, que es la reflexión sobre nuestra propia existencia. Y, de forma coherente, se sitúa este don entre los dioses, tal vez los mismos que castigaron a Prometeo cuando apiadado de la humana condición, nos trajo el fuego que calentó nuestra vida y alumbró la sed de sabiduría. El fuego nos hizo dioses.

Un gran poema, F.O.C, desde el principio hasta el final, en el que el relato va creciendo en intensidad y rotundidad para terminar en un cierre -cosa ralmente difícil cerrar bien un poema- de gran mérito. Mi más sincera enhorabuena por tu trabajo.

Salud.

Nota.- Curiosamente las siglas de tu nombre componen en catalán el nombre del fuego: foc, sobre el que has versado en este poema.

[ferxy]

Gracias por el comentario, y me alegro que te guste
me han dicho que también escribes poesías, y no me queda más que recomendarte una página donde un grupo de gente publicamos nuestros versos,somos unos pocos, pero está interesante, hay unos cuantos escritores de talento, y sus críticas (a veces más que afiladas jeje) a mi al menos me son muy utiles. Echale un vistazo, estoy seguro de que te gustará.
http://www.goldensword.net/index.php?salir=1
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Fuerza y Honor